GEOGRAFÍAS ARTÍSTICAS
Poca preocupación estética se
desprende del quehacer cotidiano de los protas de la película. Tampoco hay
aspiraciones en esta línea en la historia relatada, en los hechos narrados.
Pero sí hay una estética muy cuidada que ayuda a contar la historia. El
director quiso rodar en blancos y negros, sin apenas color. Era su propuesta
para contar una historia como ésta. El color, o el no color, al servicio del
relato. Más tarde añadió tonalidades, nada inocentes o arbitrarias, y el
producto le ha quedado redondo.
Otras veces lo he dicho, aquí va
una más. Cuando la Naturaleza está inspirada es insuperable y el paisaje
Noruego es arte. Conmueve, abruma, hace sentir pequeño, no deja indiferente.
Los dioses vikingos esculpiendo montañas, riscos y valles, bramando a todas
horas con vientos poderosos y enviando gotas de agua de todos los tamaños, y
seguro que frías, heladas.
En un escenario así, la Naturaleza
deja claro quien manda y es ajena a toda la belleza que crea. Le sale de
natural, sin esfuerzo, sin miramientos, sin intención. Es un artista ciego e
inmisericorde, y además aquí, frío, muy frío, muy nórdico.
En medio de este desafío de
belleza ignorante, el hombre ha creado su refugio. Pueblecitos de cuento, como
Bergen (muchos de los escenarios de la película se rodaron allí) Hogares hechos
de color y madera curada. Oasis en los días crudos, que son un puñado, pero
seguro que soportables porque esa naturaleza atrapa y ancla a quienes la
habitan.
Alesud (Matt Rudge)ñadir |
Un nuevo vistazo e información de primera mano
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