30/12/14

Historia 25. La sal de la Tierra

Documental
DOCUMENTARTE

Una pasión que se convierte en trabajo, y esta ocupación laboral se engrandece al adquirir dimensión social y nivel artístico. Lo que nos cuenta el documental “La sal de la Tierra” no es un ejemplo único, no obstante no abundan. Que el trabajo de cada día sea una pasión para el que lo desarrolla es ya un lujo, pero que se transforme en un regalo para los demás, es sencillamente maravilloso.

A dos manos, Juliano Ribeiro Salgado, hijo del fotógrafo, y el director alemán Win Wenders nos acercan a la biografía de Sebastián Salgado, y sobre todo, a su obra. Los datos biográficos están ahí, no podía ser de otra forma pues ayudan a entender su trabajo, pero aparecen en función de su obra.

El hombre, la sal de la Tierra, es el tema central de la fotografía de Salgado. Aunque no de forma exclusiva, pero si en su mayor parte, son los hombres y mujeres sencillos, en sus vidas diarias, en sus entornos naturales, en sus desdichas, los que acaparan el objetivo de su cámara. Sebastiao toma prestada su tristeza, su angustia, su inocencia, su esperanza, para enseñarnoslas y conseguir una descarga instantánea, una agitación de nuestra conciencia anestesiada. Imágenes potentísimas en su contenido y absolutamente bellas en su resultado. Impactantes instantes fijados de los que Salgado extrae su esencia, aquello que es difícil de nombrar con palabras.

Detrás de un gran hombre, o de su proyecto, siempre hay una gran mujer. Amén. No son demasiados los detalles o aspectos que aparecen de Lélia, no obstante son suficientes para darnos cuenta de la talla de esta mujer. Un paso atrás, siempre ahí pero invisible. No obstante, el público que se acerque a conocer el trabajo de Salgado no puede por menos que reconocer su función como soporte familiar y guía laboral de su marido. Además, en el último proyecto ha sido ella, con ese tesón que se le adivina, la protagonista y el empuje necesario para dar una vuelta de tuerca en el trabajo de su marido y en su orientación vital. Puede que esta mujer tenga una biografía por escribirse.

El documental se presenta como una narración a tres manos. Tres aproximaciones diferentes. Win Mendes codirige y da su opinión personal como un admirador más del trabajo de Salgado. Su hijo, realiza el guión y dirige junto a Mendes, pero aporta el punto de vista íntimo de un hijo que ha visto el esfuerzo que ha requerido a su padre llegar donde ha llegado, e intenta conocerlo un poco más y rendirle homenaje. El propio Salgado también tiene voz y es, claro está, la aproximación más interesante. Aún sabiendo que una vez que se finalice un trabajo así, ya no le pertenece y que es de cada uno que lo observa, es un placer escuchar al autor explicándose.

Aunque el relato cronológico sea el formato elegido en la narración, el documental empieza pisando fuerte con  fotos de la mina de oro de Serra Pelada. Un caos organizado rebosante de humanidad en un esfuerzo primario y esencial. El cuerpo central del documental, nos hunde en la miseria humana hecha realidad en escenarios como Africa o la ex Yugoslavia. Aquí el personal traga saliva. Salgado nunca pierde la compostura, estética, pero en estos lugares su objetivo da cobijo a todos los desheredados de la Tierra. En la sala de cine donde yo pude ver el documental, se produjo un suspenso mudo. Ni el rasgar de una bolsa de maíz, ni el chasquido de una palomita, ni una tos, ni un revolverse nervioso en la butaca. Nada. Clavados y con el corazón encogido. Por fortuna, el último trabajo del fotógrafo y de su mujer, y con el finaliza el documental, es una bocanada de aire fresco esperanzado y un canto a todo lo bello y digno de conservación existente en el mundo. Un torbellino anímico.







Historia 25. La sal de la Tierra

Arte










¡DIBUJAR CON LUZ!
La palabra fotografía encierra un significado  precioso. La palabra es la unión de dos vocablos griegos: φως phos y γραφίς grafis, luz y dibujo, dibujar con luz. Bonito eh? Sencillo. Parece fácil invertir un poco de dinero y conseguir una cámara fotográfica con ciertas prestaciones y ponerse a dibujar con lo que la luz hace visible y con lo que oculta. Ya, fácil.

¡Cómo mira este hombre! su mirada. Uno de los encantos de todo lo relacionado con la estética, la sensibilidad y la expresividad es que ante la misma visión, cada cual ve cosas diferentes. Salgado dice que miramos con arreglo a lo que llevamos dentro, y añade que a él su formación en el área de las ciencias sociales, era economista cuando se convirtió en fotógrafo, le ha hecho mirar el mundo de una determinada mirada. Seguro, pero hay un punto de genialidad que separa a los grandes de los demás.

El fondo, el marco que da cobijo a la figura que se retrata, el encuadre que delimita el entorno, aquello que debe estar en la foto ya que añade significado. Salgado al mirar por el objetivo le da mucha importancia al entorno que rodea al motivo principal. Si no es el adecuado, no merece la pena fijar el instante que se presenta ante el objetivo, el resultado no será el mismo.

¿Qué tiene el blanco y negro que todo lo potencia y transforma?  Si la fotografía es dibujar con luz, el blanco y negro debería ser su formulación más pura, desde el blanco, la totalidad, hasta la nada del negro. Entre ellos todos los matices de grises. Hay algo de genérico y esencial en esta modalidad. La atención no se desvía con rojos poderosos ni se remansa con azules celestes. No, va al grano, directa al alma de la imagen. Así si hablamos de desesperación todo te lleva a una mirada o a un gesto, no hay distracción cromática que atenúe o difumine el fogonazo que recibes. El blanco y negro, con su séquito de grises, estuvo en el origen de la fotografía y seguirá ahí, ausente de modas, mientras se encuentren ojos como los de Salgado.

A tener en cuenta, las lecciones del maestro, Sebastiao Salgado (Premio Príncipe de Asturias de las Artes, 1998)


Ha estado en Madrid, pero en este momento se puede ver su último trabajo, Génesis, en Caixaforum de Barcelona


Ampliamos la mira, y aunque las listas tienen poca sustancia en sí mismas, aquí me sirven para conocer otros excelentes artísticas de la fotografía.

Con un poco más de detalle.




Fotografía ¿arte ó profesión?



Historia 25. La sal de la Tierra

Historia
                          NECESARIO


La historia de la fotografía no tiene un recorrido temporal grande y la mayoría de sus representantes provienen del mundo occidental. Así pues no hay que irse muy lejos para llegar a los primeros pasos de la disciplina y de sus representantes. A cambio, la evolución técnica ha sido trepidante; el desarrollo temático y la ampliación de sus objetivos no ha dejado de crecer y su difusión entre el gran público es tal, que se puede decir que su utilización es masiva. De esta forma, aunque con ninguna autoridad y muchas ganas de disfrutar, casi todo el mundo tiene algo que decir sobre la fotografía. En este momento, la mayoría llevamos en nuestros bolsillos, uno de esos teléfonos completísimos, como las hamburguesas, que incorporan una cámara de fotos y con la cual, además de retratar a la familia, nos dedicamos a disparar a troche y moche intentando captar la fugacidad de un instante bello, curioso o único, según cada cual.


RETRATO
MODA
REPORTEROS DE GUERRA
                                                     DESNUDO
La posibilidad de captar y dar testimonio de una realidad que debe ser difundida es tan poderosa, la imagen conecta sin necesidad de explicación ni idioma, que la fotografía-documento o social es una de las modalidades que se presentan como imprescindibles. Pero además, si al hecho de ser un documento con una función social le añadimos una vocación estética, como en el caso de Salgado, ahí yo me inclino y descubro.

Historia 25. La sal de la Tierra

Libro


UN POCO DEL MAESTRO EN CASA

Otras Américas. 1986
Comunidades del noreste de Brasil, montañas de Chile, Perú, Ecuador, Bolivia, Guatemala y Méjico.






Sahel:el hombre en peligro. 1986.
Testimonio de las consecuencias de una sequía catastrófica en las zonas de Chad, Eritrea, Etiopía y Sudán.






Sahel: el fin del camino. 1988














Trabajadores. 1993
Salgado recorre los cinco continentes haciendo un homenaje a todos los trabajadores, que desde la Revolución Industrial, siguen trabajando sin descanso en un mundo competitivo insaciable.











Terra. 1997
Conjunto de fotografías en las que aparecen las condiciones de vida de trabajadores rurales y marginados de Brasil.












Migraciones. 2000
Repercusiones sociales de los movimientos migratorios de millones de personas que intentan establecerse un lugar para simplemente seguir viviendo.










Génesis, 2013
Salgado busca la belleza de montañas, océanos, desiertos, pueblos y animales, en un mundo todavía no destruido.


Para seguir conociendo

La fotografía como documento social, GISÈLE FREUND
Colección FotoGGrafía, 2011
La fotografía, que puede ser interpretada como elemento de conocimiento y como obra de arte con frecuencia, a la vez que información y arte, es un instrumento de comunicación sujeto a muchos avatares y a toda clase de manipulaciones. La historia de la fotografía no puede ser únicamente la historia de una técnica. Puede afirmarse que La fotografía como documento social (Photographie et Societé, 1974) es, no sólo el trabajo más importante de la autora, sino indudablemente el más ambicioso y profundo, por el tono del análisis de los hechos que nos relata a modo de historia sociológica, política y artística de la Fotografía, desde sus precursores hasta nuestros días. (GG)

Grandes fotógrafos, ROBERTO KOCH.
Blume,2012
Veinte grandes fotógrafos, veinte autores con diferentes historias y experiencias profesionales: todos ellos han marcado la historia de la fotografía y han dado lugar a nuevas formas de ver, encrucijadas y momentos memorables de los que ya no es posible volver atrás. De Henri Cartier-Bresson a Sebastião Salgado, de Gabriele Basilico a William Klein, de Man Ray a Walter Evans, de Robert Doisneau a Martin Parr, de August Sander a Peter Lindbergh, de Robert Mapplethorpe a Herb Ritts, de Margaret Bourke-White a Steve McCurry, de Robert Capa a James Nachtwey, de Elliott Erwitt a Helmut Newton y de Mario Giacomelli a Nobuyoshi Araki: sus experiencias son ya parte constitutiva de nuestro bagaje visual. Un amplio panorama de lo que ha sido la fotografía en el siglo xx.(Blume)

Life. Los grandes fotógrafos, AA. VV.
Lunwerg, 2013
En el 75 aniversario de la revista LIFE, publicamos una antología de las fotografías más significativas aparecidas en la revista. Este libro presenta el trabajo de los fotógrafos de la revista  LIFE a lo largo del siglo XX,  y las imágenes que se han convertido en iconos del siglo pasado, así como joyas poco conocidas de lo s archivos de la revista, e incluso hitos de nuestra historia reciente o retratos de celebridades (Casa del libro)

Historia 25. La sal de la Tierra

Música

CELEBRANDO LA VIDA

Estoy selvática y suavemente rítmica. Brasil, país de nacimiento de Sebastiao Salgado, suena a voces de la selva amazónica y a los ritmos suaves de la bossa nova.

Observando las fotos que Salgado hizo a niños, he recordado una recopilación de canciones tradicionales brasileñas y portuguesas para niños, Cancionero infantil del Papagayo Magdeleine Lerasle y Aurelia Fronty de la Editorial Kokinos, realmente delicioso. No he podido encontrarlo en la red, pero a cambio, me he topado con una versión orquestal de una de las canciones, muy buena.


En cuanto a la bossa nova es una de las grandes aportaciones de Brasil a la historia de la música. ¿Quién dice lo contrario después de escuchar esto?

A Felicidade - Vinicius - Toquinho - Maria Creuza

Aquarela - Toquinho Orquestra Arte Viva Amilson Godoy

Vinícius de Moraes, Toquinho e Maria Creuza - Que maravilha (La Fusa)

Vamos a la selva. Imaginada, no vivida pero muy sugerida. La leyenda de La Malinche de Salvador Sebastiá, ambientada en una selva un poco más norte, invita a escuchar todos los sonidos imaginables.

La leyenda de La Malinche - The Legend of La Malinche - Salvador Sebastià
Sigo en la zona. Cierro los ojos y me veo en un barco, navegando por el Amazonas, escuchando las “ninfas” que seguro la pueblan

Dôme Épais - Flower Duet - From Lakmé - Léo Delibes

Y para una panorámica, sobrevolando la selva, me llevo la calma de Dan y William Gibson en Softly into the night.  

Volviendo al documental, Laurent Petitgand ha acompañado la obra gráfica de Salgado con una música honda y reflexiva
Laurent Petitgand- the salt of the earth- Papu´s song (Official Music Video)
Le añado otra
Phil Coulter : Lament For The Wild Geese

Ya. El momento final de mirar con ojos verdes de vida, siguiendo el ejemplo de “Génesis”, con ese espíritu positivo por celebrar todo lo bello que tiene todavía nuestro planeta.
Future Islands - "A Dream Of You And Me"


Mil gracias a mi colaborador



Códigos Ocultos



INTERMEDIOS

14/12/14

¡Pepe, me voy a Marte!

¡PEPE, ME VOY A MARTE!

Vamos lanzados, está claro. Por pura coincidencia me he encontrado, en  un breve espacio de tiempo, con un buen puñado de noticias relacionadas con el espacio exterior y su exploración.  Cada vez es más fácil dejarse llevar por el placentero vagabundeo interestelar y comprobar que los científicos y técnicos se ponen mano a la obra para hacerlo realidad. Mirar al cielo y soñar, no cuesta nada. En eso somos muy buenos, llevamos muchos años haciéndolo, milenios. Otra cosa son los inconvenientes que impone la realidad para hacer posibles los sueños, pero en eso estamos.

Las incógnitas y los retos son de envergadura. Alta ambición. Apostamos por ir tan lejos como seamos capaces de imaginar, luego ya veremos hasta donde la realidad nos deja llegar. ¿Qué nos encontraremos ahí fuera? ¿Cuánto de largo y ancho tiene ese espacio que nos permite flotar sin descanso? ¿Y si salimos de nuestro acogedor trozo de tierra, nos dará tiempo a volver y hablar de ello o nos moriremos por el camino contado estrellas?  ¿Qué extranjeros encontraremos por esos mundos ignotos? ¿Gentes de cerebros enormes y cuerpos endebles que nos fulminarán nada más echarnos una miradita encima, o bien, compadecidos de nuestra temeridad, nos bendecirán compartiendo su alta tecnología con nosotros? No sé, no sé…

La gran máquina de imaginar imposibles y hacerlo asequible es Hollywood. Ya he comenzado mi viaje con el Interstellar de Christopher Nolan. Situación crítica en la Tierra y los científicos más preparados devanándose los sesos para saber cómo salvar al mundo. Yo sin miedo, un viaje a través de agujeros negros de la mano de Matthew McConaughey. ¿Con quién mejor? Pequeño problema, no tan pequeño: los espacios infinitos y la longevidad humana. De bruces con la relatividad y Einstein, y aquí, me pierdo un tanto.

Pero antes de salir de nuestro hogar con el desparpajo con el que lo hacen los astronautas de la peli, habrá que investigar un poco más. Ya hace  diez años que la sonda Philae salió a la caza de su cometa, hasta conseguirlo el pasado 13 de noviembre. Como si se tratara de una rémora en busca de su tiburón, la sonda corrió ligera hasta alcanzar al cometa, y después de un par de brincos, se acomodó en su superficie pétrea para seguir viaje con su “protector”. Es el momento de los científicos, Philae les envía información.

Esto es investigación de altos vuelos: grandes inversiones, equipos multidisciplinares de primera línea; resultados a medio, largo plazo; grandes ambiciones y mayores sueños. Pero también hay investigación de vuelo rasante, más cercana, como el producto de una empresa llamada Celestia Aerospace dedicada a la fabricación de satélites de entre 1 a 10 kg. de peso (caben en el bolsillo). Se dedicarán a experimentar en microgravedad (usos farmacéuticos, científicos en general, espionaje?...) Por un pellizco (200.000 euros) tienes un satélite a tu disposición, quizá un regalo de Navidad…
                                                                               
Si esto es un no parar, un torbellino de novedades, un hervidero de news. Lo penúltimo: éxito en la misión de la NASA al enviar la nave Orion el 5 de diciembre. Es la primera nave no tripulada que se envía con la intención de que puedan viajar astronautas, los transbordadores los dejaron para el desguace en 2011. Suma y sigue…

          Misión Orión


Pero no perdamos la perspectiva y nos emborrachemos de éxito. Habitamos en cuerpos físicos, y éstos tienen sus servidumbres. El científico y el técnico resolverán los problemas más arduos, los imponderables, pero ¿y lo prescindible que colorea la vida y la alegra y adorna? Está muy bien no perder las buenas costumbres, ni en la Luna, y darse pequeños homenajes. Eso han debido pensar los integrantes de la última tripulación rusa Soyuz, que el 24 de noviembre pasado se acopló con éxito a la Estación Espacial Internacional. A su equipaje, la astronauta italiana, ha añadido una cafetera Express. Seguro que allí arriba han recibido con agrado esta variación en el equipaje. Y es que a nadie le amarga un dulce. Por ahora, la comida galáctica creo que no es merecedora de ninguna estrella Michelin, así que será una parcela de la vida cotidiana a mejorar (nota: pedir ayuda a los grandes cocineros de la deconstrucción).

La comida, mejor dicho, el placer que proporciona la buena mesa, forma parte de un conjunto de facetas que hacen del hombre lo que es. A los grandes retos que nos plantea el espacio exterior, habrá que unir la resolución de los inconvenientes domésticos, ese gran montón de cosas pequeñas que hacen de la vida merecedora de ser vivida.  ¡A ello¡





29/11/14

Historia 24. Canta Irlanda, JAVIER REVERTE

Libro


GEOGRAFÍAS LITERARIAS Y MUSICALES

¡Pero qué bien te lo montas Mr. Martin! Cada vez más listo. Esta vez has sido muy ambicioso uniendo tres de las cosas que más te gustan, según  he leído y oído: viaje, literatura y música.
Aquí está de nuevo Mr. Reverte dándose un garbeo por uno de sus países preferidos: Irlanda. Esa Irlanda de inclementes y recias borrascas; de prados y lomas infinitas; de gentes levantiscas y sufridoras pero también bullangueras y amantes del buen elixir que se sube a la cabeza y desata las lenguas; de música popular con vocación de eternidad; de un historia atormentada y brava, y de una literatura que no se expresa únicamente con palabras, sino que perfuma el aire que se respira en calles y prados alimentando a sus gentes. A mí no me engañas, Mr. Martin, este último aspecto es definitivo en tu amor por ese cacho de tierra al noroeste de Europa.

Se puede viajar por muchos motivos. Seguramente tantos como personas realizan esa actividad. Las causas más socorridas son  conocer el arte, las costumbres, la historia, la gastronomía, las playas,  el folklore o los garitos de moda… de un determinado territorio geográfico, o simplemente por dejar de ver las caras de todos los días y olvidarte de todo, ¡vaya, por huir de lo cotidiano y conseguir que el tiempo pase más despacio y de más de sí! Perfecto, pero don Javier propone otra posibilidad, un viaje literario y musical a través de una geografía. Recorrer kilómetros teniendo como brújula los escritores que allí vivieron o escribieron; posicionarse en lugares físicos que inspiraron obras maestras e intentar contagiarse de algo de la magia que invadió a esos autores; escuchar y compartir la corriente eléctrica al tararear músicas que cuentan y cantan historias, comunes a otros pueblos, y la par intransferibles, entre las gentes que las compusieron y les siguen dando vida. La propuesta es ambiciosa, pero es una de las formas más profundas de conocer a un pueblo.

“Ahora creo que a Irlanda la diferencia, sobre todo, la idea o los sentimientos que los irlandeses tienen sobre su patria y sobre sí mismos. Y que esa emoción o idea se expresa sobre todo en forma lírica. A las naciones no las significan tan sólo su historia, su geografía y sus gentes, sino tambíen sus mitos, su poesía, su música, sus canciones y, en el caso irlandés, el peso que la leyenda tiene sobre la realidad”

La realidad a través de su lírica, bien.

Las buenas lecturas despiertan los sentidos y abren el apetito de más. Te cogen por la pechera y te llevan de la mano a otras.  Esa es una cualidad nada desdeñable de los textos hechos con corazón y toques mágicos. Reverte siempre se preocupa de mostrar una buena colección de lecturas alternativas, relacionadas o esquinadas pero que abren posibilidades al lector de sus obras. Aquí más que nunca. Uno de sus motivos más fuertes para vagabundear por Irlanda son sus escritores. Jonathan Swift (Los viajes de Gulliver); Oscar Wilde (La importancia de llamarse Ernesto); Samuel Beckett (Nobel 1969); Patrick Kavanagh (poeta); William Butler Yeats (poeta. Nobel 1923); Abraham "Bram" Stoker (Drácula); Brendan Behan (dramaturgo); Seamos Heaney (Nobel 1995); George Bernard Shaw (Nobel 1925); James Joyce… Hay motivos más que suficientes para perderse con alguno de ellos, bueno con su obra.

Reverte en estado puro: “Esa mañana de junio de 2004 se celebraba, pues, el centenario del paseo dublinés de Bloom y del cortejo de Joyce a Nora. Y la fiesta, ideada en 1954 por un grupo de escritores irlandeses, entre otros, Patrick Kavanagh, era ya una tradición en Dublín: cientos de dublineses vestidos de época llenaban las calles del centro de la ciudad, visitando los escenarios descritos en el libro, y un par de avenidas habían sido cortadas al tráfico por la policía. A mí, que vengo de un país en donde sólo se cierran las vías  públicas para dar paso a carreras ciclistas, manifestaciones políticas, procesiones religiosas y desfiles militares, me resultaba gratificante que el motivo fuera un libro ¿Cuándo le haremos un homenaje parecido a Cervantes?, me preguntaba”

Geografía literaria, Reverte busca los lugares físicos que habitaron los escritores para conocerlos y poder entenderles un poco más, quizá para contagiarse del embrujo que inspiro tantas fabulosas páginas.

“Seguí viaje hacia la iglesia de Drumcliff y la mansión de Lissadell, al norte de Sligo, dos de los escenarios principales de la ruta que sigue los rastros de William Butler Yeats en el condado ( ) Traía un libro de bolsillo con poemas de Yeats. Lo abrí por la página del último largo poema en el que trabajaba cuando murió”

De esta forma literatura y geografía se funden y Reverte realiza un viaje que va más allá de lo que está a la vista. Me ha convencido. Hago la firme promesa de meter en el bolsillo “Campos de Castilla” de Antonio Machado (me queda más a mano)  e ir a comprobar si yo también puedo viajar de esta forma.


Es un viaje muy documentado, por otra parte como todos los de Reverte, no obstante, en éste nos  deja ver más esa preparación. Abundan los datos históricos, citas y textos de los escritores a los que sigue su huella, letras de multitud de canciones que hablan del carácter y de la historia del pueblo que las creó e introduce a la Naturaleza como un personaje fundamental. Y aquí don Javier se pone muy poeta

“El Atlántico se mostraba enrabietado ese mediodía, rugía con furor y descargaba sobre la costa golpes inmisericordes, como un boxeador empeñado en concluir un combate por K.O. Al fondo, el océano tenía el tono del acero oxidado, revolcándose sobre sí mismo, espumoso y agrio, pugnando inútilmente por devorar los islotes de hierro”

“Un sol asustadizo trataba de asomar entre los jirones de las nubes y el vigoroso viento provocaba un sonoro alboroto de las hojas de los árboles”

Salí hacia Belfast con el atardecer a mis espaldas: bramaba un sol de sangre sobre un cielo blanquecino, como rojos mofletes incendiando el lívido rostro de un bebedor”

¿Tendrán algo que ver el clima desabrido y el paisaje recio y duro con la creación de un alma interior tan lírica que se expresa a través de una literatura y una música tan rica?

Por lo demás, todo el Reverte escritor viajero está aquí. El observar, reflexionar, no juzgar, disfrutar y aprender de todo lo que le sale al paso. Un paso más, filosofía de andar por casa, de tan pegadita como está, a veces ni la vemos: las virtudes de la vida cotidiana ¿hay algo más ahí?
 “De modo que, en este bonito, apacible y alegre pueblo del oeste irlandés, paseo –a menudo bajo lluvia-, almuerzo patas de cangrejo de mar con mayonesa y mejillones con salsa cremosa de ajo, contemplo los hermosos cielos atlánticos, que al atardecer tienen el brillo de la hoja de un sable herida por la luz del sol, y, muerto el día, bebo unas pintas de Guinnes en un pub donde toquen música en vivo, para seguir escuchando cómo canta Irlanda”

UN OTOÑO ROMANO


Por puro azar he enganchado un Reverte con otro. De Irlanda a Roma sin paradas, sin descanso. Un otoño romano, su último libro, fue escrito el último otoño durante una estancia de tres meses en la capital de Italia y numerosas visitas anteriores.

Conclusiones, placeres y propósitos.
  1. Siempre me ha parecido buena idea consultar la guía de viajes correspondiente antes de iniciar un viaje o preparar una visita. Veamos a qué me enfrento, pienso. Cambio de planes, voy a incluir en mis lecturas previas literatura escrita por viajeros. Sé que con esto, y con la guía también, corro el riesgo de llenar mi maleta con ideas preconcebidas y emborrachar mi sensibilidad con miradas ajenas, pero correré el riesgo. Los grandes lo merecen.
  2. Apetito de leer. Otra vez me topo con la bendita manía de Reverte por presentar un menú tan apetitoso de lecturas que no sé si me empacharé. Los entrantes con Stendhall (Paseos por Roma). Los segundos son de Joseph Pla (Cartas de Italia) y de D.H. Lawrence (Paseos Etruscos). Espero llegar a los postres con hambre y poder quedarme como una reina, pues me espera Marguerite Yourcenar (Memorias de Adriano) y Robert Graves (Yo, Claudio). Si es que no puede ser…
  3. Aunque archiconocidos y admirados por  sus trabajos, voy a hacerme con unas biografías sobre Miguel Angel  y  Borromini, no sé apenas nada de sus andanzas.  Puede que su estancia mundana estuviera a la altura de sus esculturas, o no (me entero)
  4. Rápidamente voy a ponerme a trabajar la “mirada Reverte”, consigue ver más allá de lo evidente. Y también a escuchar. Lo habladoras que se vuelven las ciudades cuando se sabe escuchar. Hablan en distintos idiomas y dicen cosas diferentes, según quien escuche.


Historia 24. Canta Irlanda, JAVIER REVERTE



Historia


ESE PUEBLO QUE TANTO MIRA HACIA ATRÁS

“Los pueblos enloquecen cuando desarrollan una pasión excesiva por su pasado. Pero, bien mirado, ¿qué pueblo no está loco?
Por lo demás, la locura irlandesa es muy particular. Joyce la definió así: Siempre fuimos leales a las causas perdidas…”

La historia contemporánea de Irlanda está inundada por algunos de los ingredientes más viejos y comunes a muchísimos pueblos del mundo: la injusticia, la venganza, la crueldad, corriendo a la par de la absoluta esperanza de un mundo mejor. Nada nuevo desde que el mundo es mundo. No obstante, la peculiar manera que han tenido los irlandeses de vivir, contarse y cantarse su propia historia, la hace merecedora de, por lo menos, conocerla un poco más.

La injusticia como fuerza-motor generadora de sufrimientos sin fin. Porque las más de las veces, cuando no parece haber otro camino, se escoge una salida violenta y entonces se abre la caja de Pandora. Cuando esa caja queda abierta, algo que no debe hacerse, lo advirtieron los dioses antiguos a los hombres, todos los males se derraman y no hay esfuerzo humano capaz de volver a cerrarla. Si la semilla de la injusticia fructifica, crea un ciclo de acción-reacción que se retroalimenta y adquiere distintas peculiaridades, según lugares y épocas, pero es una mala hierba difícil de eliminar.

Reverte habla de distintos periodos de la historia Irlandesa, pero se detiene un poco más al hablar del proceso de independencia de Irlanda (1916) o de sucesos trágicos en la  Irlanda del Norte como el Bloody Sunday (1972)





Irlanda del norte. Miradas enfrentada

Así como Reverte echa de menos más estatuas ciudadanas que recuerden  el patrimonio literario que poseemos, yo sigo admirándome del poco reconocimiento que dispensamos a algunos de los personajes históricos españoles que han contribuido a conformar el país en el que vivimos. Y en esto del reconocimiento de sus ciudadanos, los ingleses son unos maestros. No han dejado pasar ni un atisbo de notoriedad en un personaje o hecho histórico patrio. Y si su brillo no era el suficiente, se  pule a través de una nueva perspectiva, una fresca mirada o un ultimísimo enfoque. Creo que no me equivocaré demasiado si digo que no demasiada gente ha oído hablar en España de Blas de Lezo. Este Almirante de la Marina Española, defendió Cartagena de Indias (1741), frente al almirante inglés Edward Vernon. Éste sufrió una derrota sin paliativos ante Blas de Lezo, y contra todo pronóstico, un sobrino suyo, consiguió incluir en la Abadía de Westminster, un monumento en su honor  en el que se incluye dentro de su epitafio la siguiente frase: “… y en Cartagena conquistó hasta donde la fuerza naval pudo llevar la victoria.” Ole, ole, y ole. Pero en esto del recuerdo y la glorificación han llegado a cosas verdaderamente chocantes. Don Charles Darwin está enterrado también en la Abadía de Westminster, lugar de enterramiento honorable de primer orden, pero, corcho, se trata de hacer reposar los restos de uno de los científicos más importantes del mundo, cuyo trabajo minó el poder religioso, precisamente en un edificio que representa el poder del divino en la tierra. Genial.

Bien, pues Reverte se hace eco de otro personaje muy desconocido para el gran público que anduvo por Irlanda en el siglo XVI: Francisco de Cuellar. Como capitán de la Armada Española, formó parte de la Armada Invencible en 1588. Después de sufrir el desenlace que todos sí conocemos, naufragó en las costas de Irlanda y escribió un relato sobre su experiencia en la flota y todas sus andanzas por las costas de Irlanda, huyendo de los ingleses. Una experiencia a difundir.




Historia 24. Canta Irlanda, JAVIER REVERTE

Película

DIRECTORES DE LUJO MIRANDO A IRLANDA
Un recuerdo afectuoso, una reflexión emotiva, un homenaje, es lo que hace Reverte al hablar de El hombre tranquilo de John Ford. Y guiado por esa admiración, sus pasos le llevan a visitar los escenarios donde se grabó la peli. Otra razón más para viajar para un curioso sin remedio.

El hombre tranquilo
1952
Director: John Ford
Reparto: John Wayne, Maureen O'Hara, Barry Fitzgerald, Ward Bond, Victor McLaglen, Jack MacGowran, Arthur Shields, Mildred Natwick
Sinopsis: Sean Thornton (John Wayne), un boxeador norteamericano, regresa a su Irlanda natal para recuperar su granja y olvidar su pasado. Nada más llegar se enamora de Mary Kate Danaher (Maureen O'Hara), una chica muy temperamental, aunque para conseguirla deberá luchar contra las costumbres locales, como el pago de la dote, y, además, contra la oposición del hermano de su prometida (Victor McLaglen). (FILMAFFINITY)

También se asoman al libro una película-documental Hombres de Arán (R. Flanerly) en la que se retrata la dura y sencilla vida de los pescadores.

                                    Hombres de Arán

1934
Director: Robert J. Flaherty
Reparto: Colman King, Maggie Dirrane, Michael Dirrane, Pat Mullin, Patch Ruadh, Patcheen Flaherty, Tommy O'Rourke, Stephen Dirrane, Pat McDonough
Sinopsis: Documental sobre la vida cotidiana de los habitantes de las islas de Aran. Muestra la lucha diaria por la supervivencia, el enfrentamiento entre el hombre y la naturaleza y, sobre todo, la dureza del trabajo en la mar, realizado por unos hombres que consideran que morir ahogado es el tributo obligatorio que hay que pagar al monstruo del mar. Se centra en las tareas cotidianas de una familia de isleños: hacer hoyos en la roca viva y llenarlos con tierra para poder plantar en ellos sus escasos cultivos, la recolección y transporte de algas, la salida de los hombres al mar, el sufrimiento y la constante amenaza de peligros y privaciones. (FILMAFFINITY)

 O una joyita llamada La hija de Ryan. 1916, Irlanda sometida a los ingleses. Historia entretejida con situaciones históricas reales y dramas personales más reales todavía, todo ello rodado con un gusto exquisito. ¡Y que decir de Robert Mitchum!

La hija de Ryan
1970
Director: David Lean
Reparto: Sarah Miles, Robert Mitchum, Christopher Jones, Trevor Howard, John Mills, Leo McKern, Barry Foster, Marie Kean, Arthur O'Sullivan, Gerald Sim
Sinopsis Irlanda, 1916. Cuando Charles (Mitchum), un maestro rural viudo, vuelve de Dublín a su aldea natal, Rosy (Sarah Miles), una muchacha muy impulsiva, se encapricha con él y no parará hasta llevarlo al altar. Pero el matrimonio fracasa: Charles es un hombre maduro y sosegado mientras que su esposa es una joven muy apasionada y romántica que acaba enamorándose de un oficial inglés con el que se ve en secreto. (FILMAFFINITY)

La política irlandesa ha sido tratada en el cine en numerosas ocasiones. Situaciones límite, bandos irreconciliables, personajes atormentados, injusticias y crueldades…
Con este telón de fondo: Michael Collins, El viento que agita la cebada (la vi hace unos años y me dejo k.o.),  Jimmy´s Hall. Las dos últimas de Ken Loach, cineasta muy comprometido con la historia irlandesa.

Michael Collins
1996
Director: Neil Jordan
Reparto: Liam Neeson, Aidan Quinn, Stephen Rea, Alan Rickman, Julia Roberts, Ian Hart, Brendan Gleeson, Sean McGinley, Charles Dance, Gerard McSorley, Frank O'Sullivan, Stuart Graham, Owen Roe, Jonathan Rhys-Meyers
Sinopsis: Michael Collins (1890-1922) fue un líder revolucionario irlandés que luchó encarnizadamente contra la ocupación inglesa de su patria. Con sus jóvenes pistoleros llevó a cabo una serie de sanguinarios atentados que generaron una no menos cruel represión. (FILMAFFINITY)


El viento que agita la cebada
2006
Director: Ken Loach
Reparto: Cillian Murphy, Padraic Delaney, Liam Cunningham, William Ruane, Gerard Kearney
Irlanda, 1920. Dos hermanos se alistan en la guerrilla para combatir contra las tropas británicas que intentan impedir la independencia de Irlanda. El amor por su país hace que Damien (Cillian Murphy) abandone su prometedora carrera de médico y se una a su hermano Teddy (Liam Cunningham) en la lucha por la libertad. Tras sufrir varias derrotas y un escalofriante número de bajas, el Gobierno Británico decide pactar con los rebeldes. Pero el acuerdo alcanzado provoca divisiones dentro del IRA y desemboca en un nuevo y fratricida conflicto armado. (FILMAFFINITY)


Jimmy's Hall
2014
Director: Ken Loach
Guión
Reparto: Barry Ward, Simone Kirby, Andrew Scott, Jim Norton, Brian F. O'Byrne, Francis Magee, Karl Geary
Sinopsis: Cuenta la historia real de James Gralton, un activista y líder comunista irlandés que se convirtió en el único deportado político de la República de Irlanda. (FILMAFFINITY)